Mika Pottala, que empezó a trabajar como jefe de producción de Best-Hall en abril de 2021, considera la construcción de naves como un deporte de equipo. También considera su propio papel, sobre todo, como posibilitador del trabajo de los colegas del departamento de producción.
Mika Pottala, que regresó al entorno del taller y a las construcciones de acero como nuevo jefe de producción de Best-Hall, considera importante estar cerca de las tareas cotidianas y apoyar los puntos fuertes de las personas.
«Al final, la construcción de naves se basa en el aporte de trabajo de las personas, y mi tarea es crear las condiciones para que cada uno sea capaz de realizar su trabajo de la mejor manera posible», resume Pottala.
La mañana del jefe de producción empieza con una ronda por las naves. A Pottala, que ha trabajado anteriormente en empresas internacionales, le gusta que en Best-Hall toda la producción esté concentrada en el mismo terreno en Kälviä y poder saludar a cada trabajador en persona.
La tangibilidad de la producción supuso una vuelta a las raíces
Pottala cuenta con más de diez años de experiencia en la industria mecánica en Ruukki, desde donde pasó en el año 2015 a una empresa de la industria especializada en tubos de alta presión como coordinador de la unidad de producción. Pottala participó en las tareas de director administrativo cuando, en el año 2018, cuatro trabajadores se hicieron con el negocio de la empresa.
La construcción de una nueva compañía era interesante, pero Pottala no consideraba que una labor administrativa en una empresa internacional de 300 personas fuera lo que quería hacer a largo plazo.
«Me encuentro a gusto en el entorno de producción, cerca del trabajo propiamente dicho. En el taller se ve de forma inmediata y concreta lo que sucede y de qué manera afectan las decisiones. En Best-Hall me siento gratificado, pues todo está cerca y es de tamaño manejable. Tenemos un producto propio específico y puedo conocer a las personas a mi alrededor».
En Best-Hall, a Pottala también le interesaron, precisamente, la cercanía de la empresa y la cultura de igualdad que valora a todas las personas, lo que concuerda con sus propios valores.
«En Best-Hall hay muchas cosas que se gestionan de forma excelente. Es fantástico formar parte de este grupo».
El conocimiento del proyecto es la base para sacar adelante la producción
Pottala, que se describe a sí mismo como una persona que se siente a gusto en compañía de otras, también destaca la importancia de la colaboración para garantizar la eficacia y el buen avance de la producción.
«Tenemos un equipo de más de cien personas construyendo naves. Todas son necesarias para que esto funcione».
«La producción de una nave se divide en cuatro procesos: la fabricación del armazón de acero en el taller, el tratamiento de superficies, la fabricación de revestimientos y la instalación. Mi responsabilidad es ajustar el conjunto de forma que todos puedan hacer las cosas cada vez mejor».
Además de su visión de una producción versátil, Pottala también considera que uno de sus puntos fuertes es el conocimiento adquirido en el negocio de proyectos.
«La orientación en el cliente, que es el núcleo del modo operativo de Best-Hall, requiere flexibilidad también en la producción. Si cambia el cronograma del proyecto o la necesidad del cliente, nosotros también tenemos que saber reaccionar según el proyecto».
Pottala considera que la herramienta más necesaria en el trabajo de un jefe de producción es «la capacidad de visualizar la amplia totalidad y gestionar el cambio continuo manteniendo el buen ambiente».
Señor Mika Pottala
